Koldo. A, ex-agente de la Policía, entró aquel viernes por la tarde en una comisaría de la Ertzaintza de Bilbao. Koldo era de aquellos policías duros, de los que vivieron las peores época del terrorismo en el País Vasco. De los que sobrevivió a los años el plomo. Una de esas personas que parece irrompible, de tanto agacharse a ver si hay bombas bajo el coche.

LEER MAS: El Español